Universidad Centroamericana
José Simeón Cañas

 

  Edición 10, diciembre 2020

Finanzas Personales

Los millennials son una generación que ha crecido con el ascenso de la tecnología y se caracteriza por la compartición más desinhibida de información personal y el fenómeno Always and Everywhere. A la generación millennials pertenecen todos aquellos que hayan nacido entre 1980 y 2000. Un grupo poblacional que a diferencia de sus predecesores (los de la Generación X), ha vivido en un contexto de paz,relativa prosperidad económica y fácil acceso a la información.

No se puede negar que los millennials están transformando el mundo. Muchos estudios indican que en la actualidad son la generación de consumidores más grande del planeta. Por eso no es raro preguntarnos: Si tienen un alto consumo ¿Serán una generación con un desastroso panorama financiero? Price Waterhouse Coopers (PWC), publicó un estudio* 1donde analiza las características financieras, así como los factores que amenazan sus aspiraciones económicas y de seguridad de más de 5,500 millennials con resultados alarmantes.

Por esa razón analizaré cinco puntos relevantes de las finanzas personales de un millennials:

Baja educación financiera 


Según el estudio de PWC, sólo el 24% de los millennials encuestados tiene educación financiera (básica). Al no saber a lo que te enfrentas, no sabrás trazar un buen camino y por ende un buen destino. Siempre se pueden hacer pausas o cambios en el camino, “pero se necesita conocer el punto de partida y el destino final al que se quiere llegar”.

Diversificación de los ingresos


El entorno económico que le tocó vivir a esta generación es distinta a otras generaciones. Los mercados actuales son más competitivos, los ingresos son cada vez más limitados y los gastos cada vez más elevados. Si quieres empezar a “vivir como siempre haz soñado”, es importantísimo empezar a construir múltiples fuentes de ingresos.

Las deudas


Según el estudio de PWC, el 81% de los millennials tiene por lo menos una deuda a largo plazo. El 54% de los encuestados mostró preocupación cuando se les preguntó sobre su habilidad para manejar su deuda. El 53% tiene las tarjetas de crédito sobre girada y el 50% no podría atender un imprevisto si se le presentara en este momento. Las tarjetas de crédito son herramientas de financiamiento muy buenas si se utilizan de una manera adecuada, pero es importante tener claro que no son dinero extra, como dice Nathan W. Morris “Cada vez que pides prestado dinero, estas robando dinero a tu futuro”.

Fondo de retiro


Según el estudio de PWC, los millennials sacrifican sus ahorros para el retiro. Del 36% que tienen una cuenta para el retiro, el 31% ha solicitado un crédito o ha tomado dinero de ese fondo de retiro. 

Si ponemos en perspectiva que en la actualidad aproximadamente el 85% de los adultos mayores no se llegan a pensionar y termina dependiendo de sus hijos o viviendo en pobreza extrema, se agudiza el problema para la generación millennials por su pensamiento de “no tener hijos”, ¿Quién los va a mantener?, sólo queda la variable pobreza extrema. El pensamiento millennials vuelve más compleja la situación de la que en la actualidad viven los adultos mayores de otras generaciones.

Aprender de un experto 


A pesar de la problemática financiera en la que se encuentra esta generación, según el estudio de PWC, sólo el 12% busca ayuda sobre el manejo de deuda y el 27% sobre ahorro y retiro, eso significa que el 88% de los millennials no buscan ayuda financiera, evitan pensar en el problema y se abstraen de la realidad financiera en la que viven.

La buena noticia es que estos cinco puntos presentados como una debilidad en los millennials se pueden convertir en oportunidades y fortaleza, aprender a manejar las finanzas personales podría convertirse en ese tan anhelado estilo de vida que se desea, lo único que se necesita es tener el deseo genuino de aprender, tomarse el tiempo para leer acerca de finanzas personales en libros, revistas especializadas, sitios o blogs es un buen principio, agendar citas “de dinero” contigo mismo y dedicar algunas horas a administrar las finanzas personales es lo que convertirá esas debilidades en puntos fuertes. Cuanto más se conozco de nuestras propias finanzas, mayor confianza habrá para administrar el dinero en el largo plazo.

Si necesitas más ayuda, considera contratar a un coach financiero que te ayude a crear un plan para alcanzar tus metas. La realidad depende de lo que se haga ahora, recuerda ¡para vivir mejor educación financiera!