¿Cómo deben los valores influir en la ciencia?

(Fragmento)


Hugh Lacey

Swarthmore College/ Universidade de São Paulo

Traducción de Luis Alvarenga

 

Los científicos hacen juicios de valor todo el tiempo. Sopesan sus teorías. Se preguntan: ¿Esta teoría se ve confirmada gracias a la evidencia? ¿Posibilita nuevas previsiones y explicaciones de fenómenos importantes? ¿Es consistente con otras teorías ya aceptadas? Todas estas son preguntas acerca de la aceptabilidad de una teoría, sobre su valor cognitivo (epistemológico, racional). Los criterios de evaluación que las preguntas sugieren —adecuación empírica, poder de predicción y de explicación, etc.— se designan como «valores cognitivos» (Lacey, 1998: cap. 3). Existe cierta controversia en torno de cuáles deberían ser los valores cognitivos apropiados —empero, no está en debate que el que los valores cognitivos tengan que cumplir un papel central en la práctica científica—.

Una teoría puede ser evaluada también de otros modos. ¿Es útil? ¿Para qué fines? ¿Puede aplicársele para resolver un problema práctico? ¿Sus aplicaciones pueden servir a los intereses de determinados valores morales y sociales? ¿Sirve a los intereses personales (del investigador)? ¿Es consistente como un punto de vista ideológico o religioso? Estas son preguntas acerca del valor social, político, económico o personal de una teoría.

El contenido íntegro de este trabajo puede leerse en la edición N° 81 de la revista Realidad

Volver al índice de Realidad